" (...) He’s, like, the nicest guy I’ve ever met. When was the last time he forgot to hold open a door for you? Oh, yeah, that’s right …never .” "
***Advertencia: Creo que no hay spoilers. El trailer spoilea más que mi comentario.***
Ok, seré sincera: la portada me atrajo. Qué quieren que les diga, tengo una cosa con las alas.
Y resultó que juzgar un libro por su portada no fue tan malo: lo único que me mantuvo con la curiosidad viva para terminarlo fue Patch Cipriano (lamentablemente nunca conocemos su verdadero nombre y todo el rato me estuve borrando la imagen de Robin Williams como
Hush, Hush es de esos libros en los que desearía que el protagonista fuera el personaje secundario. O que no estuviera narrado en primera persona, justo en la voz de la chica que me gustaría zamarrear un buen tanto. Porque en serio, ¿hasta cuándo con la tonterita de poner a la protagonista en el papel de víctima universal? Sé que el libro está dirigido a adolescentes, pero cuando el chico que recién estás conociendo explica en clase su plan para escoger, acechar y aislar a su supuesto interés amoroso (¡hasta dice que le gustan vulnerables! ¿Qué más quieres, Nora, un letrero con lucecitas?), el que recién después de semanas - capítulos reconozca en él una actitud predadora... argh, me sacó más de un gesto de exasperación esta chica.
Pero Nora Grey juega el papel de víctima no asumida. Anota tips para flirtear - como parte de su plan para sacar información a un barman - y no se da cuenta de que casi todas las conversaciones que tiene con Patch son coqueteos. Me recordó en varios minutos a Elena Gilbert (protagonista de The Vampire Diaries, la serie de tv, no el libro que aún no leo) pues sus historias son parecidas. Pero donde Elena es testaruda, Nora cede y cede. Ok, el chico malo y misterioso te atrae. ¿Pero tienes que aceptar que te imponga dónde y cuándo juntarse, por ejemplo?
(Cielos, el trailer oficial deja peor al libro...)
Por otro lado, Patch es un personaje interesante. Inserto en la mitología judeo cristiana de los ángeles caídos, su historia se deja entrever (probablemente más entretenida) sobretodo hacia el final del libro. Temí que lo hicieran jugar el papel de héroe trágico, traumado, taciturno y contenido. Pero de haber sido así, habría cambiado de libro.
Oh, la cita del inicio. La dice la mejor amiga de Nora y creo que deja en claro los estereotipos con los que estas muchachas (y tristemente los lectores de HH) crecieron. No, el chico más agradable no es el que te sujeta la puerta, te saca a pasear y te da regalos. No si todo eso no va acompañado de una actitud coherente, respeto y cariño.
Bueno... está bien escrito, tiene buen ritmo y el background mitológico es interesante, aunque poco profundizado. Pero a diferencia de
**Siguiente**
Tengo en la mira a varios, ese es el problema.