domingo, 24 de enero de 2010

Semana 3+: The Dreaming Place

Primero una aclaración.

Terminé The Dreaming Place el domingo pasado, en un intento de leer algo que me subiera el ánimo. La razón: el triunfo en las presidenciales de la derecha y mi último gramo de "fe en el pueblo" desvanecido en medio de mi rabia y pena. Al menos por los siguientes 4 años deberé abstenerme de ver noticias, algo virtualmente imposible para mí. Lo que significa que muy probablemente criaré una bella úlcera estomacal, maltrataré mis dientes y puede que me disloque (más) los dedos. En fin...


"Such people are disconcerting to those who haven’t traveled here; they make people uneasy, because madness—no matter how slightly it has brushed against someone—always seems dangerous to
those who haven’t known its touch." 
The Dreaming Place, Charles De Lint



***Advertencia: Spoilers, comparaciones empapadas de sueño y esquirlas emo ***

  Leí The Blue Girl el año pasado y me gustó tanto que inmediatamente vinculé a Charles De Lint a mi lista mental de "historias bien contadas, buenos personajes, con angst bien proporcionado y fluff abundante". Mi equivalente literario a un tazón de chocolate caliente.


Pero parece que The Dreaming Place (TDP) no logró romper mi marea de depresión existencial. De hecho, tengo pensado volver a leerlo en un tiempo más, para comprobar esta primera percepción.
Extrañamente, no me convencieron las protagonistas. Quizás fue el juego de los estereotipos opuestos entre las primas-hermanas Nina y Ashley. Y siendo De Lint, obvio que tenemos el material para ver por qué Nina es la hija buena, inteligente y "normal", mientras Ash es la rebelde, oscura "chica problema".


No obstante, otro de mis problemas con TDP es que demasiado pronto en la historia sabemos cómo va a terminar. En serio, la acción en este mundo paralelo con sus propias reglas y personajes, por muy bien descrito y equilibrado con lo que pasa en el mundo "real", no lograron distraerme de mi conteo de "y ahora va a pasar esto... ajá, ahí pasó". Y conste que no me molesta leer el último párrafo de un libro antes de siquiera decidir leerlo. Eso de que lo importante es el viaje y no el destino, lo aplico muy bien en mis lecturas (Ojalá pudiera hacerlo en mi vida).


 Quedé con la sensación de haber conocido una familia, su casa, su historia reciente y sus conflictos internos sólo para tomar once con ellos y luego nunca más volver a verlos. ¿Gusto a poco le llaman, no?


Nota aparte para Cassandra Washington, la amiga extravagante de Ash. Ella si apareció concreta en mi mente, (interpretada por alguien muy parecida a Gina Torres) con los pocos vistazos que nos da el autor. Dado que TDP es parte de la saga de Newford (serie de historias que De Lint une por aquella ciudad ficticia, pero que no tienen consecuencia entre ellas), tengo esperanzas de volver a encontrarla por otra historia.


¿Me arrepiento de haber leído The Dreaming Place? No, pero más que nada porque me ofreció un recreo al angst de Estuche de Muerte. Creo que este es otro ejemplo de libro-leído-en-momento-equivocado.


¿Lo recomiendo? No creo poder responder honestamente esta pregunta. Después de mi segunda lectura podré decir sin titubear "Claro!" u "Creo que De Lint tiene mejores opciones". Por ahora, me abstengo.


**Siguiente**


Debo mi reporte del libro que me tocaba para esta semana. Que terminé el miércoles en la mañana. Pero lo haré cuando no esté dormitando.

 

1 comentarios:

Dusty dijo...

Tengo a "The Blue Girl" en mi lista de Amazon hace mucho. De Lint comenzé "Trader" (que le encantó a mi cuñado), pero no lo terminé. Demasiado pensante para el estado post post-grado en el cual estaba en ese momento. En todo caso, es uno de esos autores que sé que debería leer....Supongo que no comenzaré por TDP =P